Mucho se habló durante el pasado año de las apartamentos para alquiler vacacional o (VUT: viviendas de uso turístico). Parece que el tema va a seguir de actualidad y todo apunta a que en 2018 seguiremos la misma línea.
Si el año pasado protagonizaron el debate, en gran medida, grupos de ciudadanos que protestaban por el crecimiento incontrolado de este tipo de viviendas en determinadas ciudades o barrios de éstas, ahora «entran en escena» otros agentes implicados: las Administraciones encargadas de la regulación normativa, propietarios de VUT, asociaciones que representan a diferentes agentes económicos, etc. Ante este panorama, una cosa está clara: las viviendas de uso turístico han llegado a nuestras ciudades para quedarse. De hecho, este tipo de apartamentos tienen una demanda de usuarios que no deja de crecer.
El auge apartamentos de alquiler turístico
Son muchos los expertos que analizan actualmente el auge de las viviendas de uso turístico. Se trata de un fenómeno no sólo a nivel nacional sino que es abordado también en diversos foros internacionales. La proliferación de estos apartamentos es algo global, íntimamente ligado con las nuevas tecnologías y los cambios sociales que traen. Y es que este tipo de viviendas introducen una serie de novedades respecto a otras alternativas de alojamiento:
- Permitir a sus usuarios disfrutar de un alojamiento muy cómodo (cuando se trata de un apartamento bien diseñado).
- Podemos encontrar inmuebles de calidad por un precio menor que el de un hotel, renunciando a servicios que no necesitamos.
- Ofrecen la posibilidad de gozar además de total independencia, más autonomía y privacidad o libertad de horarios.
Estas cuestiones son muy valoradas por un nuevo perfil de turista, como bien sabemos en Rez estudio. Por todo ello, se prevé que el consumo de apartamentos turísticos continúe creciendo.
VUT para una nueva forma de hacer turismo
La necesidad que tenemos las personas de conocer nuevos lugares no es algo nuevo. Eso sí, el acceso a la información no ha hecho sino incrementar las inquietudes de los viajeros. El hecho de que viajar esté al alcance de cada vez más personas es algo muy positivo. No se debe olvidar que, además del motor económico que representa el turismo hoy en día, viajar abre la mente. Viajar y convivir con personas de los lugares que visitamos nos permite conocer y entender mejor otras culturas.
Nos encontramos ante nosotros con un importante reto y, al mismo tiempo, con una gran oportunidad. Hemos de aprovechar la fulgurante aparición y crecimiento del número de VUT para garantizar que venga acompañada de múltiples beneficios. Esos aspectos positivos deben repercutir en los diversos sectores que, de un modo u otro, les afectada el fenómeno.